Viernes, fin de semana y demás...

El viernes pasado quedamos yo y Jackie para ver Cats (así aprovechaba para devolverle el DVD que ni me dio tiempo para verlo en mi casita). Que vergüenza, vamos, cuando llego a su casa estaba su madre y me obligó a cenar. Yo un poco desubicada por que no sé qué pensaría esa mujer si se enterara de que no soy solo la nueva amiga de Jackie, ejem… Lo bueno es que estaba muy contenta de que su hija hubiese encontrado una nueva amiga y me trata casi como si fuera de su familia. Me sentí feliz por el trato, no hay mucha gente que trate a los demás con tanto cariño a primera vista. Me sentí muy bien.

Al final nos quedamos las dos solas y nos pusimos a cantar con Cats. Que par de flipadas somos, que gritos pegábamos cuando entonamos alguna canción que nos gusta como Rum Tum Tugger o Mr. Mistoffelees, jajaja. Qué pensarán los vecinos? Eso me da casi igual. Solas en el salón, la verdad es que pillamos algo de frío y nos pusimos una manta encima. Tranquil@s que no hicimos nada debajo de ella, solo nos besábamos de vez en cuando. Al final, nos dormimos juntas y me desperté con ella abrazada a mí. Me sentí conmovida, en serio, nunca había estado en una situación mas bonita. Ella allí dormida, sonriendo en sueños, con la cabeza sobre mi pecho. Me sentí muy feliz. Desee que el tiempo se parara y que la Luna de los Jellicle no dejara de iluminarnos. Me he dado cuenta de que la quiero mucho.

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Curiosamente, este finde dio una nueva sorpresa. No os lo vais a creer. Yo aún no me lo creo, pero ha sucedido. Como estaba tan feliz, pues llamé a Lucía para contarle todo esto que me está pasando. Va la tía y se me cabrea, me empieza que qué es de nuestra relación y talytal. Y yo “ relación? Una amistad con un poco de sexo, no?” Bueno… Se me puso como la novia (que no es) mas celosa del planeta y me empezó a decir de todo. Ella que se va de pingoneo por ahí, que se folla a todo bicho viviente y no pasa nada (como es natural, por que nunca hemos tenido una relación amorosa), y con lo mío se pone echa una fiera.

No sé si se ha cabreado conmigo por mucho tiempo, poco o para siempre. Sinceramente, me da igual. Llevo demasiados años soportando sus imbecilidades y sus putadas. Además, llevo meses dándome cuenta de que nuestra amistad se está deteriorando a marchas forzosas. En fin, Lucía, visto lo visto, nuestra amistad me importa una mierda y ya sabes a donde te puedes ir.

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Chúpate esa Schumacher, que todavía no tienes el Campeonato en bandeja. La verdad que ayer disfruté como nunca de los “pajaritos” y de la posición de la grulla. Ya he dicho que no es que me caiga muy bien Alonso, pero le apoyo incondicionalmente en la pista, ya que es un hacha del volante. Igual me vuelvo a tirar al suelo del salón al terminar el GP de Brasil (como en 2005), una vez más y con los gritos de mi madre de que me comporte como una persona formal y no como un animal, jajajaja.

Me alegra saber que al menos hay algo de felicidad y tranquilidad en mi vida en estos momentos.